La temática se enfocó sobre el tratamiento de aguas residuales, residuos sólidos y biorremediación

Yolimar Quintero y Diego Tami forman parte del grupo de estudiantes del quinto semestre de ingeniería ambiental que participó en el seminario técnicas aplicadas en microbiología ambiental que organizaron las docentes Andrea Pulido y Cleomary Oliveros.

El evento tuvo por objetivo que los alumnos realizaran una serie de exposiciones de artículos científicos, nacionales e internacionales, elegidos por ellos mismos en las temáticas de tratamiento de aguas residuales, residuos sólidos y biorremediación.

Los estudiantes Yolimar Quintero y Diego Tami se refirieron al tema de la calidad microbiológica del agua para utilizarla con fines de irrigación, es decir, para cultivo de zonas agrícolas.

Los estudiantes explicaron que este trabajo que presentaron lo desarrolló la Universidad del Zulia, LUZ, y una vez que lo revisaron hicieron algunas sugerencias al caso en estudio.

Dieron a conocer que como fuente de estudio utilizaron las lagunas de estabilización de LUZ, en ellas se hicieron pruebas químicas y de laboratorio acerca de los microorganismos presentes en las lagunas, para conocer si el uso del agua era adecuado en el área agrícola.

En el trabajo se evaluaron las bacterias coliformes fecales y totales que son indicadores si existe contaminación a través de ellas, se hicieron una serie de pruebas en colaboración con el Centro de Desarrollo Científico y Humanístico, el Centro de Investigación en Microbiología Ambiental y la facultad de Investigaciones en el Agua de LUZ.

Se pudo conocer que las aguas de las lagunas de estabilización de LUZ, no van directamente hacia áreas agrícolas sino que se utilizan para el riego de las plantas de la zona interna de la universidad, aun así se quiso estudiar si son efectivas para el riego de zonas agrícolas.

En la discusión de resultados, se observó que el 90% de las aguas que se utilizaron durante el tiempo que duró el trabajo no estaban aptas para el uso de irrigación, pues no cumplían con los requerimientos mínimos necesarios por la Organización Mundial de la Salud, OMS, para destinarla en zonas de cultivos. Los valores de bacterias presentes al pasar por la planta de estabilización siguen siendo altos, lo que conlleva a que la planta o el sistema no estaban cumpliendo con su objetivo final como es remover la mayor cantidad de microorganismos y de agentes patógenos.

No están aptas para utilizarlas en irrigación, desde el punto de vista microbiológico porque puede afectar a las personas que trabajan en la planta de tratamiento como a la comunidad cerca del sector y a las personas que consumirán en un futuro los productos agrícolas.

Indicaron que en el trabajo solo hacen referencia a los análisis físico-químicos y en este caso como un aporte del grupo se comparó con el decreto 883 que es la normativa principal venezolana sobre el tratamiento de aguas residuales que establece si pueden ser utilizada en irrigación o cultivos

Durante la realización del seminario en la primera sesión un grupo de estudiantes también disertó sobre aguas residuales relacionado con la calidad microbiológica de las aguas, evaluación de sistemas de tratamiento biológico, remoción de contaminantes específicos de las aguas residuales y sobre el proceso ANNAMOX para tratamiento de lixiviados

Para finalizar, en la segunda sesión, se abordó sobre el tratamiento de residuos sólidos y biorremediación, en cuanto compostaje y digestión anaerobia de residuos sólidos, microorganismos magnetizados para descomposición de materia orgánica y biodegradación de hidrocarburos. /Dulce Camargo S./Fotos: Ricardo Ramírez