La gran familia UNET se reunió para agradecer a Dios por contar con la Parroquia y sus numerosos aportes espirituales

 

Siendo las 12 del mediodía del domingo 11 de octubre, se celebró en la Iglesia del Ancianato Padre Lisardo ubicada en Pirineos, la eucaristía para celebrar los 21 años de creación de la Parroquia Divino Maestro de la Universidad Nacional Experimental del Táchira.

 

Entre los asistentes a la misa se destacan el vicerrector académico Alexander Contreras, la secretaria Elcy Yudith Núñez, el decano de Docencia Silverio Bonilla, el presidente de Sirca José Moreno, el profesor Jubilado y fundador de la Parroquia Carlos Pardo,  la encargada de la Parroquia, la señora Emma Ocando y el párroco, el padre Sergio Suárez.

Al iniciar la Eucaristía, el profesor Carlos Pardo leyó una breve reseña de la fundación de la Parroquia, recordando que fue en 1992 cuando el académico Humberto Acosta se juramentó como Rector y le pidió a Monseñor Marco Tulio Ramírez Roa crear una parroquia universitaria dentro de la institución, un lugar propicio para la oración, la evangelización y el encuentro cercano con Dios; fue el 12 de octubre de 1994 que se ofició la misa donde se crea canónicamente la parroquia Divino Maestro de la UNET; desde allí, se comenzó a hacer un trabajo conjunto para hacerlo realidad; en sus estatutos destaca brindar atención pastoral de los miembros de esta casa de estudios. Desde ese momento el padre José Laureano Ballesteros fue el guía espiritual desempeñando un excelente trabajo hasta febrero de 2014 cuando entrega la sagrada misión al presbítero Sergio Suárez, quien además es egresado de la universidad en la carrera de  Ingeniería Mecánica.

 

Ya en la homilía, el padre Sergio hizo una reflexión sobre la trayectoria de todos, quienes lo largo de 21 años, han formado parte de la Parroquia, a quienes les agradeció su apoyo constante, pues cada persona ha dejado su granito de arena para la Parroquia que hoy existe. También se refirió a que cada quien debe en la actualidad asumir su responsabilidad en la acciones que realiza y por ende ser conciente de hacer lo coherente en pro de todos, dejando de lado la mediocridad  y egoísmo.

Para culminar la homilía, pidió al altísimo por cada miembro de la UNET, por su trabajo y empuje por hacer de la Universidad la mejor; y expresó su gran agradecimiento al joven Ricardo Contreras, recientemente fallecido, quien con su amor sembró la fe de Cristo en muchos compañeros, amigos y comunidades.

Las ofrendas fueron entregadas por las autoridades, los miembros de la Asociación de Profesores de la UNET  y personal administrativo asistente a la misa.

 Al finalizar, los jóvenes de la pastoral universitaria reflexionaron sobre su paso por la universidad y sobre lo valioso de haber conocido y compartido con Ricardo Contreras, un joven luchador  y con hermosos valores, quien siempre fue ejemplo de amigo y ser humano, a él dieron un eterno gracias y que estando con Dios ilumine cada paso en el andar de los unetenes. Texto: Jenny Contreras/Fotos: cortesía de Luis Enrique Zambrano.