Con la finalidad de informar sobre la situación de la seguridad a lo interno y externo, se realizó reunión con autoridades y gremios para proponer y apoyar soluciones

Debido a los problemas reinantes en la Universidad Nacional Experimental del Táchira en cuanto a seguridad, se llevó a cabo una reunión con las autoridades, decanos, representantes de los gremios y el departamento de seguridad de la institución.

En un marco que afecta el campus de Paramillo, así como en las Unidades Académicas y de producción foráneas, el jefe de seguridad, Cristóbal Roldán expuso las precariedades existentes en materia de resguardo de personas y bienes a lo interno y la falta de patrullaje externo por parte de las autoridades nacionales.

En cuanto a lo externo indicó que el problema central era la iluminación que le compete a la empresa Cadela, la limpieza y desmalezamiento de los alrededores por parte de la alcaldía con el apoyo de la gobernación, así como el resguardo de la zona por parte de la Policía Nacional Bolivariana y la GNB.

Dijo que están haciendo grandes esfuerzos para la recuperación de equipos de vigilancia el CCTv para el monitoreo de áreas comunes y estacionamientos de los campus de la UNET, para lo que pidió la colaboración de las diferentes instancias de la universidad para mejorar los procesos de seguridad.

Durante la exposición, Cristóbal Roldán realizó una descripción detallada de los diferentes problemas que van desde: hurto de bienes nacionales, vehículos, pertenencias personales y sabotaje de cámaras, iluminación, consumo y distribución de drogas; ingreso de personas ajenas a la institución. Sugirió el establecimiento de normas para mejorar la seguridad interna, en especial de las Unidades de Producción.

Durante su explicación fue muy enfático que la dificultad de mayor consideración es la falta de personal de vigilancia, que entre muchos factores tiene que ver con la movilidad y la difícultad que en ocasiones tienen para llegar hasta la institución, también los permisos y las renuncias con el alegato de la situación país, así como la imposibilidad de nuevas contrataciones.

Sobre la vigilancia pasiva hizo énfasis en la adquisición de nuevos equipos, así como dispositivos de comunicación como radios y una central. Una vez concluida la exposición se desarrolló un derecho de palabra en la que se hicieron una serie de propuestas las cuales van a ser motivo de evaluación para su respectiva aprobación y aplicación con la finalidad de subsanar esa deficiencia como consecuencia de la falta de un presupuesto ajustado a la realidad./ Ricardo Ramírez Rivas