Durante su ponencia el doctor Idelfonso Méndez hizo un esbozo de la situación actual del contexto regional de las publicaciones

Con todas las imprentas de San Cristóbal cerradas, la escasez de papel y demás insumos, los altísimos costos de impresión, a quienes se empeñan en sacar adelante algún producto editorial solo les queda migrar para sobrevivir.

La exposición del doctor Idelfonso Méndez durante la conferencia “Panorama de la actividad editorial del Táchira”, que ofreció en la Universidad Nacional Experimental del Táchira, en el marco de la Semana del Libro y del Idioma, mostró una realidad compleja y difícil de superar.

Durante su disertación, se refirió en el contexto regional a tres universidades que todavía publican libros: UNET, Universidad de Los Andes núcleo Táchira y la Universidad Católica del Táchira; las instituciones: Biblioteca de Autores y Temas Tachirenses, Fondo Editorial Simón Rodríguez de la Lotería del Táchira, Fundación Proculta, y la Fundación de Estudios Históricos.

Para poder cumplir con este cometido, han debido migrar de lo impreso a lo digital. “Se ha migrado a la fuerza a ese formato, porque todas las imprentas de San Cristóbal cerraron y sus empleados fueron a la calle. Queda una sola en Mérida que peligra por la falta de papel”, explicó.

Agregó que las circunstancias actuales les han obligado a fortalecer las páginas web existentes o a crear nuevas para alojar allí los materiales o la información al respecto. Esto lo ve como un aspecto positivo porque les ha permitido mantenerse y no desaparecer.

En cuanto a la manera como este cambio ha afectado a los lectores, dijo que hay dos factores: Primero, que las ventas digitales son casi inexistentes y por eso se alojan gratuitamente en la web; ya que en Venezuela no hay esta cultura pues se va internet a hacer descargar gratis. Segundo, los libros impresos en librerías sí se venden. Esto, en lo que concierne a distribución.

En lo que respecta a la receptividad del lector, es muy lenta y tímida, a pesar de la difusión. Y puso como ejemplo su caso, el cual considera frustrante, pues tiene en su haber tres libros digitales, muy poco conocidos. A su juicio, éste es un camino que se comienza a transitar, donde se deben crear condiciones y tener paciencia, sobre todo en un país en crisis.

“Es eso o bajar la santamaría. Es una posibilidad que hay que aprenderla, promoverla, trabajar en equipo, no desesperar. Es fundamental ser útil en nuestro país, es el papel que realizamos de promoción, distribución, divulgación de valores, lo hacemos por vocación todos quienes trabajamos en esta área. Hay que compaginar una serie de factores, corregir fallas, fortalecer las cosas buenas y copiar a los otros países en ese campo. Lo fundamental, es seguir adelante”.

Como punto a favor dio a conocer que este año se publicarán por la Biblioteca de Autores y Temas Tachirenses tres libros, y por la Fundación de Estudios Históricos, un libro. Todos digitales. Aún quedan muchas cosas por hacer./Norma Pérez M./Fotos Manuel García.